Es muy curioso ver como, en toda manifestación o protesta que se precie, los distintivos en forma de pegatinas y banderas nunca faltan. Creo que sería conveniente conocer las razones de esta costumbre, tan incomprensible para algunos y tan obvia para otros.
Al menos a mí me gustaría saberlo, pero ante la imposibilidad de que sus propios protagonistas – los que sacan a pasear la bandera como si fuera un perrito, me refiero – me lo sepan explicar, me he creado una opinión propia al respecto. Por supuesto, que ningún banderista se sienta ofendido. Mejor que deje en el foro sus opiniones.
Tanto partidos políticos, como sindicatos y organizaciones independientes aprovechan estas reuniones masivas de gente para darse publicidad. Lo peor es que casi todos pican y se llevan una bandera de UGT o una pancarta donde firma ERC, y además están contentos porque se las han regalado. No tengo nada personal en contra de estas organizaciones que no tenga en contra de las demás. Es una critica extensiva a toda organización que se vende por estos medios populistas.
Ya ocurría en las manifestaciones contra la LOU y contra el PHN. Pero quizá se esperaba que, en una manifestación globalizada de las alternativas contra la globalización del capital, donde confluían personas de todo el mundo, los distintivos ideológicos quedaran a un lado. Aún así, se siguieron viendo ikurriñas, senyeras y hoces y martillos. Tienen sus derechos de expresión y manifestación pero, en una protesta de estas características, aunque sea sólo por coherencia entre ideas y actuaciones, las banderas deberían haberse quedado en casa. El NO a la Europa del capital, el no a la flexibilidad laboral, el no a la progresiva liberalización de la economía, el no a la Ley de extranjería, el no a un mundo desigual en definitiva, merecían una prioridad.
No importa si eres nacionalista, comunista o sindicalista. Hoy no importa, mañana quién sabe. Pero hoy, estamos todos juntos contra el mismo enemigo.
Nihao. Zaragoza. 19 Marzo 2002