Recortes sociales en Europa

Duros recortes sociales se producen en los países europeos. El alto déficit que mantienen las naciones de la zona euro –causado en gran medida por las ayudas millonarias que los estados prestaron a los bancos privados, emitiendo deuda pública-, ha llevado a la mayoría de ellas a decidir que lo adecuado es realizar recortes sociales. Además de los recortes, en gran parte de los países europeos, se han subido los impuestos indirectos –que recaen sobre toda la población-, mientras se mantienen los directos –que recaen proporcionalmente sobre la renta-. Estas medidas emprendidas en la mayoría de países europeos, destinadas según los gobiernos a la recuperación económica, no solo cuestionan el estado del bienestar si no que empobrecen a la mayoría de la población.

– La ayuda a Grecia – por Francesc Sánchez
– Algo más que recortes – por Lucía El Asri
– Sobre solidaridad y escapismo – por Gabriel Jackson

Grecia

El déficit público de Grecia es de un 13,6% y se pretende que en 2014 este no supere el 3% del PIB (Producto Interior Bruto). La deuda griega es de 400.000 millones de euros. Tras meses de tensión y ante la inminente bancarrota del país la Unión Europea y el FMI (Fondo Monetario Internacional) han prestado a Grecia 110.000 millones de euros a cambio de que el gobierno griego realice recortes. El presidente griego George Papandreou (socialista) para llegar a la cifra del déficit arriba indicada pretende reducir 30.000 millones de euros de su presupuesto. Las medidas a tomar son: la reducción en un 15% del sueldo de los funcionarios, la congelación de las pensiones, el incremento del IVA –que pasará del 19% al 21%-, y el aumento de un 10% de los impuestos al combustible, el alcohol y el tabaco. En el país heleno se han producido varias huelgas generales. El ambiente es tenso.

España

El gobierno español quiere ahorrar 50.000 millones de euros hasta 2013. Las medidas de recorte que ha llevado a cabo son la reducción de un 5% del sueldo de los funcionarios y la congelación de las pensiones. Asimismo se restringen las prestaciones de la Ley de la Dependencia y se elimina el cheque-bebé. En España, el IVA ha subido de un 16 a un 18%. El presidente José Luís Rodríguez Zapatero (socialista) también ha realizado una reforma laboral que abarata el despido. El gobierno también ha puesto en marcha un plan para la privatización de las Cajas de Ahorros. Finalmente los miembros del gobierno se han recortado un 15% su sueldo. En España se ha realizado una huelga de funcionarios, una huelga de los trabajadores del Metro de Madrid, y en septiembre hay convocada una huelga general.

Francia

El gobierno francés quiere ahorrar 100.000 millones de euros hasta 2013. Para lograrlo va ha recortar 45.000 millones de euros de su gasto público. El presidente Nicolas Sarkozy (conservador), que quiere reducir el déficit de Francia del 8% al 3%, ha insinuado que quiere retrasar la edad de jubilación, que ahora se encuentra en los 60 años. En Francia ha habido algunas movilizaciones en contra de estos recortes.

Alemania

El 8 de junio, Alemania informó del mayor plan de ajustes económicos desde la II Guerra Mundial, con el objetivo de ahorrar 80.000 millones de euros hasta el 2014. Para ello, el gobierno de unidad nacional entre conservadores y socialistas de Ángela Merkel suprimirá 10.000 funcionarios, y bajará el salario al resto en un 2.5%. Más importante es si cabe la reducción de las fuerzas armadas en 40.000 efectivos. Se suprimirá también la ayuda de 300 euros a los padres que quieran dedicarse al hijo recién nacido. El déficit de Alemania es uno de los más bajos de Europa, un 3.3%, aunque este año está previsto que suba al 5%.

Reino Unido

Reino Unido reducirá 17.500 millones de libras de su déficit elaborando un plan de recortes del gasto público. Entre las medidas anunciadas por el nuevo gobierno conservador y liberal figura la congelación de los salarios públicos, una reducción del 25% en el gasto de la mayoría de los ministerios y un incremento del impuesto al consumo del 17,5% al 20%.

La ayuda a Grecia
Francesc Sánchez

Recientemente los países europeos y el Fondo Monetario Internacional han acordado conceder al gobierno griego para este año 35.000 y 15.000 millones de euros respectivamente para que la nación griega ponga sus cuentas en orden. Para que corrija su déficit del 14% al previsto 3% para el 2013. Para que ésta no caiga en la bancarrota y pueda hacerse cargo del pago de los intereses de su deuda. Hasta aquí parecería que los europeos movidos por un sentimiento de solidaridad ayudan a uno de sus socios a tirar para adelante, pero la contrapartida es que esta ayuda es un préstamo al 5% de interés, es una ayuda condicionada a que Grecia haga recortes en su presupuesto público, y es una ayuda en fin, destinada sobre todo para que Grecia pueda pagar los intereses de su deuda, en manos en gran medida de los europeos.

España presta a Grecia 9.792 millones de euros, dinero que no dispone por lo que tiene que endeudarse, emitiendo bonos al 2%. España pagara 196 millones al año en concepto de intereses y Grecia por su parte pagara 490 millones a España. Un negocio redondo si Grecia es capaz de pagar.

Los recortes en el presupuesto del gobierno griego afectan a los funcionarios, a los trabajadores en general, y a los pensionistas. Para los primeros se procede a una reducción del sueldo en un 15%, para los segundos una congelación salarial durante tres años, y para los pensionistas se reducen sus pagas de 14 a 12. Hay también una subida del IVA del 19% al 21%, y un aumento de un 10% de los impuestos al combustible, el alcohol y el tabaco.

Este tipo de recortes sociales y subidas de impuestos indirectos –recordemos que son los que afectan a toda la población- se han venido generalizando a lo largo y ancho de Europa. Tanto gobiernos de derechas (partidos conservadores) como de izquierdas (partidos socialistas) van a hacer recortes sociales. Argumentan que se ha de reducir el déficit para poder pagar sus emisiones de deuda. Pasan por alto decir que las emisiones de deuda se incrementaron notablemente tras la ayuda de los bancos centrales europeos a la banca privada golpeada por la crisis financiera. Es una rendición en toda regla a los mercados que poseen la deuda pública que paradójicamente les salvó de la bancarrota.

Bancarrota en los mercados que provocaron los inversores privados al invertir en hipotecas subprime que dejaron de pagarse. Hipotecas para gente humilde que ante los primeros impagos vieron subir sus intereses.

Redacción. Economía. El Inconformista Digital.

Incorporación – Redacción, Barcelona 16 Julio 2010.