Cuatro días después del paso del huracán Katrina por el sudeste y sur de los Estados Unidos, las consecuencias muestran un serio panorama de destrucción. Cientos de muertos, quizá miles, se amontonan en las calles inundadas de ciudades y pueblos. La fuerza del viento del huracán ha debastado miles de casas y edificios, instalaciones petroleras, carreteras y puentes, dejando incomunicada y desabastecida una vasta región del sur del país.
Ésta incomunicación ha impedido hasta ahora la evacuación de decenas de miles de personas en algunas localidades, y ha impulsado el «sálvese quién pueda», el caos, el descontrol y los saqueos. – en el interior
Golpe al sector petrolero – (Al menos ocho refinerías y un número indeterminado de plantas de extracción ?no inferior a 58? fueron golpeadas por el huracán, quedando su actividad en algunos casos paralizada, y en otros perdida durante meses. – en el interior)
Nueva Orleans bajo las aguas
Francesc Sánchez ~ «El padre del alcalde de ésta ciudad, en una extraña entrevista realizada por una radio española, explicaba que Nueva Orleans se encontraba a varios metros por debajo del nivel del mar, rodeada por las aguas del río Mississippi y del lago Pontchartrain.» – leer más
Estados Sureños: entre la paradoja y el abandono
Teresa Galeote ~ «Miles de personas permanecen a la espera de ser rescatadas; la escasez de recursos humanos y técnicos no han permitido la evacuación de personas que están al límite de sus fuerzas; enfermos ancianos y niños morirán antes de que les puedan prestar la ayuda necesaria.» – leer más
Pedro Prieto ~ «Muchas cosas está sacando a la luz la desgracia del huracán Katrina, las miserias humanas de muchos sobre todo. Algunas tales como la propiedad privada primero y las personas después, ley de oro de la acumulación de la riqueza, tan venerada por el editorialista.» – leer más
Las zonas más afectadas se encuentran en los estados de Lousiana, Mississippi, y en menor medida Alabama y Florida.
Estado de Lousiana
La ciudad de Nueva Orleans del estado de Lousiana ha sido la más afectada. Ésta ciudad ha quedado sumergida bajo las aguas, el hambre, el caos y los saqueos. Mientras miles de personas permanecen aún en la ciudad en espera de ser rescatadas, los diques de contención del río Mississippi y el lago Pontchartrain han estado amenazando con romperse y provocar una nueva catástrofe.
Recorte del área del Superdome / Digital Globe
En el estadio de Superdome y el Centro de Convenciones de Nueva Orleans, se han estado amontonando desde hace cuatro días entre 25.000 y 60.000 personas en espera de ser evacuadas. Según informaciones de testigos, cerca y dentro de estas instalaciones se han formado grupos de personas armadas que acaparan los alimentos. En el día de ayer, según fuentes del ejercito norteamericano, varios helicópteros que acudieron al estadio Superdome fueron tiroteados.
Los pocos equipos de salvamento desplazados en los últimos días ha sido desbordados por la situación. Solo a ultimas horas de hoy un importante destacamento de la Guardia Nacional de unos 10.000 efectivos, ha empezado a evacuar a las personas atrapadas, repartir alimentos, y tomar situaciones en la ciudad, con ordenes de «disparar a matar» a los individuos que vayan armados o realicen saqueos.
El alcalde de Nueva Orleans, Ray Nagin, en diversas ocasiones ha manifestado ante los medios de comunicación su descontento ante la lentitud de las tareas de las tareas de salvamento. “No paro de escuchar que la ayuda está llegando, que está llegando. Y mi respuesta a esto, a día de hoy, es: ‘¡Tonterías! ¿Dónde está la comida?’.» Sus críticas han apuntado directamente a la administración Bush. «La gente muere mientras las autoridades federales dan ruedas de prensa”.
La cifra de muertos en ésta ciudad, aunque se desconoce, se prevé superior al millar. La bajada de las aguas en los próximos días dejara en evidencia la magnitud de la catástrofe. Sin embargo, a los efectos directos del huracán se ha de sumar la lentitud de las tareas de rescate y evacuación de la ciudad, la falta de alimentos y la actividad de los grupos armados que se dedican al saqueo; estos factores pueden hacer aumentar consideradamente las cifras de muertos y heridos.
Otras ciudades afectadas por esta situación en el estado de Lousiana son las de Slidell y Gulfport, donde los daños materiales, humanos ?sin cuantificar?, han sido considerables.
Estado de Mississippi
La ciudad de Biloxi ha quedado completamente destruida. Hasta la fecha se han reportado 185 víctimas mortales. Laurel y Misuri han quedado también afectadas. Un millón de personas se han quedado sin suministro eléctrico, líneas de teléfono, y transporte publico. Al menos existen 20.000 refugiados y un número indeterminado de personas pendientes de ser evacuadas.
Estados de Alabama y Florida
En el estado de Alabama, las ciudades de Mobile, Dauphin Island y Bayou La Batre, sin llegar a los extremos de los estados vecinos, han quedado también afectadas. Se han reportado tres víctimas mortales, y un corte de suministro eléctrico que afecta al menos a 200.000 personas.
En Florida, primer estado afectado por el huracán Katrina, los cortes de luz de decenas de miles de personas aún han no se han restablecido. Durante el paso del huracán murieron once personas por la caída de los arboles.
El sector petrolero norteamericano ha sido gravemente dañado después del paso del huracán Katrina por en el golfo de México. Al menos ocho refinerías y un número indeterminado de plantas de extracción ?no inferior a 58? fueron golpeadas por el huracán, quedando su actividad en algunos casos paralizada, y en otros perdida durante meses. Éste parón en la producción ha provocado la falta de abastecimiento en los estados afectados por el huracán, y una escalada en los precios de la gasolina que queda en las gasolineras.
Refineria inutilizada en el área de Nueva Orleans
Ante éste problema energético el gobierno norteamericano en primer lugar puso en circulación parte de las reservas estratégicas, y pidió «un consumo racional» a los habitantes. Medidas que de momento no parecen haber servido ni para paliar el déficit de combustibles, ni para frenar la subida de los precios, incluso en estados lejanos al lugar de la catástrofe.
Para tratar de corregir la situación, el presidente George W. Bush, ha pedido ayuda a la AIE (Agencia Internacional de la Energía). La AIE ha pedido que sus países miembros saquen de sus reservas estratégicas 60.000.000 de barriles para ponerlos a disposición de los EEUU.
La Unión Europea en la reunión de ministros en la ciudad británica de Newport, estaría estudiando de que formar responder a ésta llamada energética desde EEUU, bien por emisión de capital o envió físicamente de crudo en petroleros.
España ya habría sido reclamada por la AIE y la OCDE (Organización de Cooperación y Desarrollo Económico OCDE) para que envíe, durante 30 días, 70.000 barriles diarios a los EEUU. Alemania que ha mostrado su disposición para movilizar sus reservas energéticas, y ayuda de cualquier tipo, ha argumentado que este tipo de movilización de reservas energéticas debe de repartirse entre todos los países miembros de la AIE.
Redacción / Internacional. El Inconformista Digital.
Incorporación – Barcelona, 1/2/3 Septiembre 2005.