Varios miembros de El Vaticano en declaraciones a los medios de comunicación italianos han criticado duramente la nueva ley aprobada por el Congreso que permite los matrimonios civiles entre homosexuales.
El presidente del Consejo Pontificio para la Familia, el cardenal colombiano Alfonso López Trujillo, en unas declaraciones al Corriere della Sera ha llegado incluso a pedir a los funcionarios públicos católicos que se opongan a cumplir esta ley.
El lobby del Vaticano y sus seguidores:
un paso más hacia el untraconservadurismo
Teresa Galeote ~ «¡Inaudito!; estamos rodeados. La santa alianza se hace fuerte y, como siempre, decide sobre los destinos de católicos y no católicos. Malos cristianos son aquellos que no toleran lo que no entienden.» – leer más
laico y aconfesional
Marga Vidal ~ «Desde los primeros tiempos de la memoria histórica, religión y organización social han ido de la mano: la dimensión religiosa-trascendente es un potente elemento en la creación y mantenimiento de la cohesión social, y un eficaz aliado en la consolidación del poder político-social.» – leer más
Alcaldes del Partido Popular acatan la llamada del Vaticano – (en el interior )
«Intromisión» de la Iglesia Católica
Según Trujillo “Lo que se está haciendo en España, además con una mayoría restringida, es la destrucción de la familia, ladrillo tras ladrillo”, «la familia es un don recíproco total entre hombre y mujer que exige la fidelidad en el tiempo, la exclusividad, la apertura a una nueva vida y a los hijos».
Por lo tanto según Trujillo «Y porque se trata de una ley inicua, la Iglesia llama con urgencia a la libertad de conciencia y al deber de oponerse».
Aclarando, «Hablo de todos los profesionales que tienen que aplicarla: la misma objeción de conciencia que se pide a los médicos y a los enfermeros contra un crimen como el aborto».
«No es facultativo. Todos los cristianos, como dice el Evangelium Vitae, tienen que estar preparados incluso a pagar el precio más alto, quizá hasta la pérdida del trabajo», afirmó el cardenal vitalicio.
Estas declaraciones realizadas por el cardenal Trujillo al Corriere della Sera, que suman a otras de menor importancia, fueron asumidas, a través de una nota en «L’Osservatore Romano», por el Vaticano pocas horas después.
Desde el gobierno español, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha dicho que «la objeción de conciencia no significa que los funcionarios del Estado no cumplan las leyes». Recordando que «las leyes son para que se cumplan por todos los ciudadanos, pero sobre todo por aquellos que prestan servicios en la función pública».
Alcaldes del Partido Popular acatan la llamada del Vaticano
A menos de una semana de la entrada en vigor de la ley que permite los «matrimonios civiles» entre personas del mismo genero, un número indeterminado de alcaldes del Partido Popular ha manifestado su intención de no oficiar éste tipo de bodas.
Funcionarios públicos como son los alcaldes de Ávila, León, y Valladolid, han declarado sus intenciones de acogerse a su «derecho de objeción de conciencia» para negarse a realizar en los consistorios los nuevos enlaces matrimoniales.
Esta posición sencillamente, como sucede en otras ocasiones, haría delegar las funciones del alcalde con respecto a los oficios a otros funcionarios públicos subalternos —concejales—.
La polémica que según los líderes del Partido Popular «obedece al mal uso del termino matrimonio» —extrapolando el matrimonio católico a los matrimonios civiles—, ha llegado a generar duras críticas y declaraciones degradantes hacia las personas que abiertamente muestran su homosexualidad. Un ejemplo son las declaraciones del alcalde del pequeño municipio barcelonés de Pontons «un gay es una persona tarada que nace con una deformación psíquica o física».
Si bien, por éste tipo de declaraciones el Partido Popular de Cataluña ha suspendido la militancia de éste alcalde —abriéndole también un expediente disciplinario para preparar su expulsión—, en líneas generales el Partido Popular en el ámbito nacional avala con sus declaraciones y silencios la aparición de éste tipo de circunstancias.
Cabe recalcar que estos hechos se producen poco después de «la llamada al incumplimiento de las leyes españolas por parte de los funcionarios católicos» que realizó Alfonso López Trujillo, presidente del Consejo Pontificio para la Familia, y que el Vaticano asumió.
A esta posición política del Vaticano —por el dominio de las conciencias y el incumplimiento de las leyes soberanas— se suman las propias declaraciones de algunos jerarcas de las Iglesia Católica en España. Entre ellas podemos remarcar las palabras de Ricard María Carles, el arzobispo emérito de Barcelona, comparando esta polémica con el exterminio de millones de personas por los nazis durante el papado silencioso de Pío XII, «No eran delincuentes los que hicieron Auschwitz, sino gente a la que se forzó o que creyó que tenían que obedecer primero a las leyes del gobierno nazi que a su conciencia». [26 de Abril]
Redacción / España. El Inconformista Digital.
Incorporación – Redacción. Barcelona, 23 /26 Abril de 2005.