Señor director:
Con muchos otros, he lanzado un suspiro de alivio cuando el Ministro de Asuntos Exteriores ha declarado solemnemente que España «de momento» no tiene intenciones de atacar a Estados Unidos.
Mi mujer, que es muy celosa, y está mirando por encima de mi hombro a quién escribo la carta, me dice que no es el Gobierno español, sino el de Estados Unidos, el que ha hecho esa promesa momentánea de paz, respecto a Irán. Más a mi favor, más aliviado me quedo, porque EE.UU. ha ocasionado demasiadas veces más daño, atacando y destrozando muchos países -dos en los últimos dos años-, por lo que sus repetidas amenazas recientes contra Irán son mucho más creíbles y terribles.
Sin embargo, -y eso no se lo digo a mi mujer, para no estropearle el fin de semana-, unas declaraciones pacifistas a corto plazo han sido usadas demasiadas veces como cortina de humo para adormecer al adversario antes de agredirlo, como muestra la historia. Esas afirmaciones «tranquilizantes» de Rice resultan así, paradójicamente, muy inquietantes, como posible camuflaje de un ataque inminente, un disfraz más en estos días de Carnaval, en los que tantas veces se ha utilizado una careta para cometer los peores crímenes.
Diego Mas. Madrid.
Cartas de los lectores.
El Inconformista Digital.-
Incorporación – Redacción. Barcelona, 5 Febrero 2005.