The Motorcycle Diaries. 128 min. EE.UU. 2004.
Dirección: Walter Salles
Intérpretes: Gael García Bernal, Rodrigo de la Serna, Mía Maestro, Facundo Espinosa, Mercedes Morán.
Sinopsis
En los inicios del año 1952, en Buenos Aires, Argentina, el bioquímico Alberto Granados y el estudiante de medicina Ernesto Guevara de la Serna emprenden un viaje a bordo de una motocicleta Norton del 39 que les llevará desde una punta hasta la otra todo a lo largo del subcontinente sudamericano. Motivo del viaje es la celebración del 30 cumpleaños de Alberto.
Con el transcurrir de los kilómetros, el inicialmente viaje de placer y en busca de aventuras, se transformará en un viaje hacia la introspección y la búsqueda del ser humano que todos llevamos dentro. El contacto con las realidades diarias de personas sencillas y trabajadoras, de los pueblos indígenas del subcontinente, y la llegada a la estación de tratamieto para leprosos en San Pablo, en el Perú amazónico, catalizará la toma filantrópica de conciencia de ambos viajeros.
Crítica
Sin entrar a valorar aspectos púramente técnicos del metraje, cabe resaltar la espléndida fotografía presente en el mismo, cuidadas y profesionales tomas que son capaces de mostrar la natural belleza que tan vívamente desprenden los agrestes parajes sudamericanos.
Dada la magnitud, tanto ideológica como mercantil (sin ir más lejos, el otro día pude comprarme en el estanco un mechero decorado con artísticas efigies del Che ofertado junto a otros muchos con más vanales motivos), que desprende la figura de Ernesto Che Guevara, se me hace un tanto presuntuoso comentar la plasticidad estética, así como el acertado o no encuadre presente en la película, aspectos que dejo para su transcripción en cualquier manual al uso de cómo comentar un relato cinematográfico.
La película es muy correcta, su director la absuelve de forma correctísima, al igual que todos sus actores, tanto principales como secundarios. La fuerza de esta película tampoco reside en su validez histórica ni argumental, su fuerza reside en el denodado empeño por parte de los artistas de mostrarnos cómo un ser humano llega a descubrir y abrazar el ideal del humanismo, del altruismo carente de intereses ocultos. Cuán bello ideal, Señoras y Señores, pues tanto en aquellos días (en los que transcurre la película), como en estos de hoy, y en todos aquellos venideros, sin humanismo no vamos a ningún puñetero lado; filosóficamente hablando, Señoras y Señores. Para ir físicamente de una punta a la otra de un continente siempre podemos hacer uso de cualquier medio de transporte, y qué más aventurero, rebelde y cargado de simbolismo cuanto a libertad se refiere que una simple motocicleta.
David López Herráez-Von Kayoyen. Heidelberg.
Redactor, El Inconformista Digital.
Incorporación – Redacción. Bacelona, 6 Diciembre 2004.