No voy a hacer un estudio sobre el origen del nombre de nuestra ciudad. No voy a adentrarme en la noche de los tiempos para averiguar sí el topónimo Talavera viene de los fenicios o de los romanos, si significa valle ancho o pueblo limítrofe. Pero si voy a referirme a las dos primeras sílabas de dicho nombre.
tala: operación de talar árboles en masa para dejar la tierra rasa. En derecho administrativo, deforestación, destrucción, arrasamiento de los bosques por el hacha y, por extensión, asolación, ruina de cualquier otra riqueza, rústica o urbana.
Dicen, no se sí es leyenda o realidad, que la península ibérica en tiempos remotos se podía cruzar de norte a sur sin poner los pies en el suelo, dada la inmensidad de bosques que la poblaban. También cuentan que los ejércitos napoleónicos esquilmaron de árboles parte de la comarca para el abastecimiento de las tropas. Pero en cuestiones de arrasar no tenemos que fijarnos mucho en los demás, nosotros nos bastamos solos. Ejemplos, muchos, demasiados.
Hace unos días se talaron en las obras del Paseo de la Estación 16 árboles que surcaban esta parte del paseo. Desde mi punto de vista la cuestión debe de afrontarse en varios parámetros. Uno el de la descoordinación existente para afrontar cualquier tipo de obra, y es meridiano en otros casos que hemos sufrido. ¿Recuerdan el famoso intento de asfaltar los paseos de La Alameda hace dos años y medio?
En primer lugar habría que ver las concejalías que están afectadas por las obras, reunir las partes y ver si hay alternativas a la tala de los árboles. Si no las hay, que sirva de pauta para la posterior plantación de árboles, si se han cuidado convenientemente, si hay que poner otro tipo, si se deben de cuidar de mejor manera para evitarles enfermedades, que las raíces provoquen daños en las casas, canalizaciones y aceras, etcétera. Y si hay alternativas a la tala, deben estudiarse y aplicarse.
¿Alguna vez se nos pasa por la cabeza que los árboles son seres vivos y que como tales debemos tratarles? ¿Alguna vez hemos pensado, por ejemplo, que los restos de agua con detergente que nos sobra de fregar no se pueden echar en los alcorques de los árboles? ¿Podemos pensar que a los árboles no les gusta que les hagamos tatuajes?
El 2 de junio de 1995 se celebró en Barcelona el Congreso “El Árbol y la Ciudad”, donde se firmó la Declaración del Derecho al Árbol en la Ciudad. Esta declaración fue firmada por Talavera de la Reina. Pues bien, la declaración dice textualmente: “En reconocimiento de que La ciudad necesita el Árbol como un elemento esencial para garantizar la Vida. El desarrollo del Árbol en la ciudad debe darse en toda su plenitud, aprovechando cuanto nos ofrece y en toda su potencialidad, si dispone del espacio y las condiciones que requiere. El sistema de Arbolado de nuestras ciudades es un sistema Básico, y como tal, debe ser valorado, planificado y gestionado. El Árbol contribuye al enraizamiento de la Cultura en el lugar y en la mejora de las condiciones de habitabilidad en el medio urbano, factores ambos, determinantes de la Calidad de Vida en la Ciudad. Nos comprometemos, como ciudadanos, como profesionales que desarrollamos nuestra actividad en torno a las estructuras, formas y dinámicas de la Ciudad, como profesionales del Árbol, personalmente y a través de nuestras instituciones a: Situar el Árbol en su papel básico, como uno de los primeros Recursos Patrimoniales de la ciudad. Desarrollar y promover, de forma integral y continua, informaciones, inventarios, técnicas de gestión, prácticas, procedimientos, productos, servicios y estándares, que posibiliten la implantación del Árbol en la Ciudad, en condiciones de Calidad y Dignidad. Difundir, informar y formar al público en general, a los diversos colectivos profesionales, a los sectores industriales y de servicios, a las escuelas, a los institutos y universidades, sobre la importancia esencial del Árbol en la vida de la Ciudad. Establecer políticas, reglamentaciones, normativas y prácticas en la Administración y Gobierno de la Ciudad que garanticen las condiciones óptimas para la vida del Árbol. Replantear todos los elementos que conforman actualmente el espacio urbano, y pensar los futuros en su concepción, planificación, producción, gestión, uso y reutilización desde la óptica de los requerimientos y su potencialidades del Sistema de Arbolado Urbano. Como Ayuntamiento firmante a que todas las consideraciones anteriores de respeto al árbol se incorporarán en nuestras normas municipales. Por lo anteriormente descrito: Nos comprometemos como Ayuntamiento firmante a que todas las consideraciones anteriores de respeto al árbol se incorporarán a nuestras ordenanzas, normas, disposiciones y acuerdos municipales”.
Por todo ello, ¿es tan complicado que una administración cumpla lo que ella misma firma?.
Emilio Sales Almazán. Talavera.
Colaborador, El Inconformista Digital.
Incorporación – Redacción. Barcelona, 30 Agosto 2004.