La organización “Billionaires for Bush: Government of, by, and for the Corporations” celebra hoy el cumpleaños del presidente George Bush con una concentración en Beverly Hills, en la confluencia de Canyon y Rodeo Drive a partir de las 5 de la tarde. Habrá habanos, champán y otras amenidades. Se requiere vestir de etiqueta.
Billionaires for Bush (B4B) es una grassroot organization que fue fundada en el año 2000 para dar soporte a la multimillonaria campaña electoral que llevó a G. W. Bush a la presidencia de la nación. Con lemas tales como “Libertad para los 400 de la lista Forbes”, “Las corporaciones también son personas” o “Estamos pagando por unas elecciones libres en América para que tú no tengas que pagarlas de tu propio bolsillo”, B4B sigue a Bush, Dick Cheney y a otras personalidades de la Casa Blanca a los eventos públicos y mítines que tienen lugar por todo el país para mostrar su agradecimiento en persona. Dar las gracias por los recortes de impuestos de los que se han beneficiado ellos y sus familias, por la desregulación económica que lucra a las corporaciones que ellos mismos dirigen (cobrando 280 veces más que el empleado medio), por dejar en papel mojado la legislación medioambiental que tanto dinero les cuesta y por transferir fondos perdidos en educación, programas sociales y sanidad para asistir a sus compañías, atendiendo a las necesidades especiales de las industrias armamentística y petrolífera.
“Estado mínimo, grandes guerras” sería otra de sus consignas. B4B ha hecho acto de presencia en la bolsa y los country clubs más selectos de todo el país. No ha escatimado recursos en hacer anuncios de televisión (véanse “Leave no Billionaire Behind” o “Just Like Us”), pero tampoco se les caen los anillos para montar contramanifestaciones al pie de la calle y organizar campañas de contrainformación para desarmar de argumentos a los Bush haters.
B4B es consciente de que para dar más reputación a su campaña necesitan incorporar algún contenido “más allá del mensaje de que somos realmente muy ricos y que nos gusta George Bush”. Así, por ejemplo, ante la acusación de que los recortes de impuestos y la desregulación económica solamente beneficia a los más ricos, se dan las razones de por qué eso es bueno para todos y en el fondo, enriquece a toda la sociedad estadounidense. De esta manera, se arguye que “los recortes de impuestos realizados por Bush mantienen a la clase obrera trabajando” o como se acostumbra a escuchar por radio aproximadamente a la hora del desayuno: “el endeudamiento familiar es bueno, motiva a la clase trabajadora para salir a currar cada mañana”. O en otras palabras, “las multinacionales también son personas” y “la mano de obra barata hace felices a las multinacionales”.
Pero sin duda el argumento más persuasivo esgrimido por los multimillonarios es la noción de que la política y la democracia son un mercado y la legislación, un fondo de inversión con un altísimo porcentaje de devolución sobre el capital invertido. Esto convierte cualquier intento de regular la financiación de los partidos políticos y de la campaña electoral en una intervención (contra natura) en la economía, una intromisión ilegítima en el funcionamiento de la democracia y en la celebración de elecciones libres. De acuerdo con www.bop2004.org todo contendiente para un puesto en el gobierno tiene patrocinadores que han dictado su programa político, es evidente que una vez alcanzan ese puesto en el gobierno su principal función es la de trabajar para sus patrones. B4B quita hierro al asunto argumentando que la legislación es, al fin y al cabo, una modalidad de inversión económica y “¡la contribución en las campañas políticas puede generar unas ganancias de hasta un 60.000%!”. Puesto que la participación política es un ejercicio legítimo de la libertad de expresión y las donaciones a los candidatos una de sus manifestaciones, cualquiera puede ejercer este derecho o dedicarse a esta actividad económica.
El objetivo de B4B es naturalmente la reelección de George W. Bush. Para los multimillonarios George Bush es todavía más querido de lo que lo fue el actor Ronald Reagan. “Bush es realmente uno de nosotros. No le tenemos que convencer de los beneficios que reporta ayudar a los ricos y a los poderosos, porque los conoce de toda la vida”.
Para los próximos cuatro años el objetivo son “cuatro guerras más” y la instauración de una “multimillocracia”, “un mundo en que los lobbyists no lo tengan que pedir dos veces”. Un mundo en que “nuestros políticos y la concentración mediática puedan llevar adelante políticas para los multimillonarios sin tener que edulcorarlo con vagas razones de interés público”. En una multimillocracia las corporaciones podrán presentarse directamente a las elecciones, el sistema de recuento electoral consistirá en “un dólar, un voto”, para crear los incentivos correctos entre los funcionarios, se les remunerará con acciones, se eximirá de cualquier tipo de responsabilidad a las corporaciones y finalmente, se eliminarán de un plumazo todos los programas sociales.
Para este año crucial B4B pretende llevar adelante “vigilias” para la defensa de los derechos de las multinacionales y la “Marcha del Millón” “para la defensa de los derechos y de los intereses de los que son absolutamente y fabulosamente ricos”. Con esta primera concentración en Beverly Hills a propósito del cumpleaños de George Bush, la campaña electoral no hace sino calentar motores. B4B se preparan para llegar en limousina a Nueva York y reunirse con el Partido Republicano en Madison Square Garden donde desde el 30 de agosto hasta el 2 de septiembre tendrá la lugar la convención en que se nominará a George W. Bush candidato presidencial para las próximas elecciones de noviembre.
Maite Padilla Zalacaín. Los Angeles, CA. EE.UU.
Redactora, El Inconformista Digital.
Incorporación – Redacción. Barcelona, 7 Julio 2004.