Álvaro Bautista Arce es un joven deportista talaverano que está en el candelero tras los últimos triunfos en un deporte tan complicado y profesionalizado como es el motociclismo.
Dicen que nadie es profeta en su tierra y, aunque deseo que el dicho no se cumpla, hasta el día de hoy así ha sucedido. Es cierto que en las últimas fechas ya se va acercando algún personaje para hacerse la foto, y muchos más que vendrán, era cuestión de tiempo, se veía venir.
Guardando las distancias en tiempo y lugar me viene a la memoria lo que me cuentan mis padres sobre Ángel Nieto. Llegado a Vallekas, exactamente al Alto del Arenal, con su familia de Zamora, sus padres montaron una pollería en la calle Pedro Laborde, cerca de donde yo vivía. Allí el joven Ángel se sentía apasionado por las motos, y su única salida fue marcharse a Barcelona, único lugar, por entonces, donde se podía acceder a ese fantástico e incipiente mundo de las dos ruedas.
Todo esto viene a colación porque el joven Álvaro ha tenido un peregrinar en busca de ayuda y salida en el deporte, cuando pocos confiaban en su potencial, y cuando no recibió ayuda como deportista de la base en su propia localidad. Más adelante haré mención sobre “algún sucedido”, ya que antes quiero hacer un breve repaso a su periplo.
Tengo un ligero conocimiento con Álvaro. Su estancia en el Instituto donde trabajaba me hizo coincidir con él, y allí fue cuando estuvo un curso con su lesión producida por un accidente en el Jarama. Pero conozco y tengo una relación muy estrecha con su abuelo, el entrañable “Bautista”, que me ha contado desde hace años todas sus andanzas deportivas.
Sus inicios con las mini-motos fueron importantes, era un poco más chaval de lo que es ahora, proclamándose campeón de la Comunidad de Madrid en tres ocasiones. En aquella época tuvieron que comprarle la moto y pagar la inscripción. Posteriormente su pilotaje le hizo recalar en el equipo “Movistar” que montó el campeón español Alberto Puig, y en el que han salido una hornada de pilotos muy importantes. Compitió en el Campeonato de España y Europa en el equipo que articuló el Club Atlético de Madrid para lo que tuvo que empadronarse en Marbella. Aquí ya empezó a disputar pruebas del Mundial como invitado.
Esto lo catapultó a fichar por el equipo que formó el jugador de fútbol Clarence Seedorf, el “Seedorf Racing Team”, con una moto de la marca italiana “Aprillia”. Este año ha conseguido ser Campeón de España en 125 cc. y puntuar en varias carreras del Mundial (4ª en una de ellas).
A grandes rasgos esta es su ficha profesional, pero quiero reseñar como los “sucedidos” a los que me refería antes han hecho que me atreviera a escribir estas líneas.
Para las candidaturas a los Premios “Ciudad de Talavera” de los años 2002 y 2003, en su categoría de Deportes, fui uno de los que buscó apoyos para que a esta joven promesa, hecha ya realidad, se le hiciera justicia en su tierra y se le diera un premio que ayudara moralmente después de tantas vicisitudes. Si ánimo de menospreciar a quienes fueron galardonados, era de los que creía que su participación en carreras por todo el mundo daría que el nombre de Talavera fuese proclamado a los cuatro vientos. No tardaré en ver, como alguno que dudaba de sus raíces, que criticaba actuaciones, según él, no demasiado “talaveranas”, le adule o salga en la foto con adhesión inquebrantable.
Sea como sea, le deseo, por él y su familia, y en bien del deporte en general los mayores éxitos.
Emilio Sales Almazán. Talavera.
Colaborador, El Inconformista Digital.
Incorporación – Redacción, Barcelona. 25 Noviembre 2003.