Poder, dinero y mentiras – por Edmundo Fayanás

En los últimos tiempos, hemos asistido a una serie de acontecimientos, que están marcando a esta sociedad: once de septiembre, guerra de Irak, el Prestige, etc. En todos ellos estamos viendo un conjunto de medias verdades, mentiras, desinformación, mucha manipulación. Veamos pues algunos aspectos de estos acontecimientos que no han sido comentados por la prensa.

Analicemos el caso del Prestige, haciéndonos algunas preguntas:
¿Quién es el propietario del fuel del Prestige? Es una compañía suiza llamada Crown Resources, que actúa como empresa tapadera. El verdadero propietario es la empresa rusa Alpha Group, donde ocupó un puesto importante el actual presidente de Rusia, Vladimir Putin. Esta compañía financió la campaña presidencial de Geoge Bush con más de dos millones de dólares y también patrocino en su tiempo la campaña electoral de Boris Yeltsin.

Esta empresa rusa, tiene un socio español, el judío March Rich, que en los años 1979-80 fue condenado en España a prisión por su dedicación al tráfico ilegal de armas. Salió de prisión tras fuertes presiones de conocidos personajes de la derecha española. Volvió a ser condenado en Nueva York. Hubo dos demandas de petición de perdón que llegaron al tribunal que lo juzgó, siendo firmadas por Bill Clinton presidente de Estados Unidos y el otro por el rey de España, Juan Carlos I.

¿Quién es el propietario del Prestige? Es un armador griego llamado Coloutos. Uno de los hijos de Coloutos ha encontrado trabajo en la Comunidad Europea. En estos momentos trabaja como asesor personal de Loyola de Palacio, por elección personal.

¿Quién es el dueños de los barcos de salvamento? Fernando Fernández Tapia “ fefe”, personaje de la vida social madrileña, “ empresario ejemplar” para el Partido Popular, vicepresidente de la patronal de Madrid, vicepresidente del Real Madrid y socio en muchos negocios del mencionado March Rich. También participante en la famosa cacería de Toledo junto a Fraga.

De la guerra de Irak, sólo voy a aportar algunos datos que son esclarecedores de muchas de las decisiones que ha tomado esta administración republicana. Entenderán por qué lo único que han asegurado en esta invasión han sido los pozos de petróleo.

La familia Bush es la séptima familia de los Estados Unidos con intereses en el mundo del petróleo. George Bush ha adquirido su fortuna personal, gracias a los buenos negocios que realizó cuando encabezaba la Harken Energy Corporation. Esta empresa petrolera tejana se llevó las concesiones petroleras de Barhein, como retrocomisión de los contratos norteamericanos-kuwatíes, negociados por el presidente George Bush ( padre), como consecuencia de la primera guerra de Irak, todo ello de forma ilegal.

El Carlyle Group fue creado en 1987, gestiona actualmente más de 12.000 millones de dólares. Este fondo financió generosamente la campaña de George Bush (hijo). Los fondos con los que operan provienen mayoritariamente de Arabia, siendo unos de sus socios más importantes la familia Bush. Está dirigido este fondo por Frank Carlucci ( exsecretario de defensa y de la CIA) y como consejero, James Baker ( exsecretario de estado) y el que está intentando solucionar el tema del Sahara. Alguna vez, ésta compañía debería explicar el por qué de sus transacciones bursátiles antes del once de septiembre, donde sacó pingues beneficios. Saliendo beneficiada la familia Bush.

La actual consejera Nacional de Seguridad, Condolezza Rice, era consejera y accionista de Chevron, con una capitalización de 124.000 millones de euros, una de las mayores petroleras del mundo.

El vicepresidente Dick Cheney, es el antiguo presidente de Halliburton, que es el primer suministrador de petróleo mundial por delante de Schlumberger, con una capitalización de 12.000 millones de euros.

El actual presidente de Afganistán, impuesto por los Estados Unidos, Kamil Karzai, fue un importante socio de la compañía petrolífera norteamericana UNOCAL

Se entiende ahora el cuidado que los norteamericanos han tenido con los pozos petrolíferos iraquíes.

La USAID, que es la sociedad creada por la administración republicana para la reconstrucción de Irak, fue puesta en funcionamiento ya en el año 2002. Ha ido concediendo contratos mucho antes de que comenzara la guerra. Ya ha concedido un contrato de 7. 000 millones de dólares, de forma directa sin concurso a la empresa KBR filial de Halliburton (Dick Cheney). Otra de las empresas beneficiadas que participaran es Betchel, en cuyo consejo de administración esta el exsecretario de Defensa, Gaspar Weimberger y el exsecretario de Estado, George Schultz.

El general norteamericano que dirigirá la reconstrucción de Irak, Jay Garner, preside una empresa de alta tecnología en la construcción de misiles. Ha declarando que la guerra de Irak ha sido misericordiosa y sublime.

Como vemos, el complejo industrial petrolífero-armamentístico está perfectamente representado en los puestos adecuados, donde se deciden las prebendas económicas de esta guerra a costa de los iraquíes.

Uno de los problemas de la reconstrucción, es que va a pasar con el petróleo de Irak. Para el republicano, Chuckz Grassley, presidente del Comité de Finanzas, dice “ el derecho internacional permite a los Estados Unidos emplear el dinero obtenido por la venta del petróleo iraquí para pagar el agua y alimentos, sanidad, carreteras y puentes, escuelas y aeropuertos”.

Sin embargo, estoy de acuerdo con David Goldwyn, exsubsecretario de Energía, con Bill Clinton, que discrepa, diciendo “ no creo que Estados Unidos tenga derecho legal a apropiarse y vender el petróleo iraquí sin previa solución del Consejo de Seguridad de la ONU. Dudo mucho que ninguna compañía que se precie vaya a adquirir crudo sin un derecho claro”.

Para el presidente de turno del Consejo de Seguridad, el mejicano, Adolfo Aguilar Zwiser, dice “ el petróleo de Irak pertenece a los iraquíes. El Consejo tiene que hacer un esfuerzo para mantener la soberanía de Irak sobre el petróleo”.

¿Qué pasa con las empresas españolas?
Está claro que las adjudicaciones directas serán para las empresas norteamericanas y británicas. Para las empresas españolas se abre la vía de cooperación a través de las subcontrataciones que se logren con las empresas adjudicatarias de éstos dos países.

Las empresas constructoras que van a participar, son aquellas que giran alrededor del Partido Popular, ACS ( Florentino Pérez), Ferrovial ( Rafael del Pino), Dragados. Repsol con Alfonso Cortina, está interesada en los campos petrolíferos de Nasiriya, su problema radica en la necesidad de fuertes inversiones, calculadas en más de 1.900 millones de dólares y en la legalidad de tal concesión.

Próximamente iremos viendo cómo éstas empresas cercanas al poder político del Partido Popular son subcontratadas, como compensación del apoyo político que España ha dado a la administración republicana de Bush en esta guerra ilegitima e inmoral.

Edmundo Fayanás Escuer.
Profesor de Historia.
Colaborador habitual de El Inconformista Digital.

Incorporación – Redacción. Barcelona. 22 Abril 2003