Reportaje: Actualidad biotecnológica ante la contaminación por petróleo

Torrey Canyon, Metula, Exxon Valdez, Aegean Sea, Prestige… todos ellos buques petroleros accidentados que han provocado importantes derrames con sus consecuentes efectos nefastos. Efectos sobre la economía, la ecología, la política, el medio ambiente en general y la vida sobre el planeta en particular.

La humanidad con sus actividades diarias está produciendo una destrucción de la riqueza y de la variedad vital del planeta como nunca antes había producido ninguna especie animal. Sin embargo, sea la humanidad capaz de redirigir su conducta en pos de un más lógico y racional aprovechamiento de los recursos naturales o no, la vida sobre el planeta no está ni mucho menos amenazada. La prepotencia humana es incapaz de destruir los mecanismos de adaptación de la naturaleza. La increíble variedad de esta última, genera un gran número de seres vivos capacitados para la adaptación en hábitats o medio ambientes dónde otros seres vivos se encuentran condenados a la muerte.

Extremófilos
De entre todos esos seres vivos antes mencionados, se pueden destacar los organismos extremófilos. Los organismos extremófilos son seres vivos, en su mayoría microorganismos, y de estos fundamentalmente archeobacterias pero también procariotas, eucariotas y ciertos otros organismos más o menos superiores, que viven en hábitats extremos en cuanto a condiciones ambientales de temperatura, pH, concentración salina, fuentes de carbono, etc. En este punto hay que redefinir el término extremo, dado que la medida está definida por el sistema de referencia utilizado. Condiciones de vida extrema para la especie humana u otras clases de seres vivos son excelentes condiciones para el desarrollo de estos organismos. Así se pueden clasificar los organismos extremófilos de la siguiente manera :

· Termófilos : crecen en hábitats con altas temperaturas
· Psicrófilos : crecen en hábitats con bajas temperaturas
· Xerófilos : crecen en hábitats con baja humedad
· Acidófilos : crecen en hábitats ácidos
· Basófilos o alcalófilos : crecen en hábitats básicos o alcalinos
· Halófilos: crecen en hábitats con altas concentraciones de sales
· Barófilos : crecen en hábitats con altas presiones
· Organismos de suelos profundos

Muchos de estos organismos son susceptibles de ser empleados en actividades humanas. Al igual que haya ocurrido a lo largo de la historia con otros microorganismos, estos son aprovechables y fundamentales en numerosos procesos industriales, como en la producción de pan, vino, cerveza, queso, yogures…etc. Así mismo las nuevas técnicas de la biología molecular en general, y de la ingeniería genética en particular comienzan a poner a disposición enzimas (catalizadores biológicos) y otras proteínas producidas por microorganismos aplicables en campos diversos como sean la medicina, la investigación bioquímica, la agricultura y las industrias petroquímica y minera, por poner un ejemplo.

La problemática petrolífera
La humanidad es hoy en día dependiente del petróleo como fuente de energía. Un bien excaso (sistema de referencia planetario) y un recurso que nos brinda la naturaleza que es dilapidado negligentemente por la prepotencia humana anteriormente aludida.

Se estima que de cada millón de toneladas de crudo embarcadas se vierte una tonelada al mar (Ref. 1). La producción mundial de petróleo es (según cifras de 1998) de aproximadamente 3200 millones de toneladas/año. Las existencias comprobadas de petróleo rondan los cien años, más menos, no hay que olvidar el grado de error siempre asociado a los cálculos científicos. Una gran cantidad de ese petróleo es derramado y/o vertido en diferentes tareas. Los buques petroleros son la punta del iceberg, dada la magnitud de la catástrofe y en gran medida por su impacto mediático. Pero la mayor parte del petróleo dilapidado es causado en operaciones diarias de limpieza de tanques de los buques, de refinerias o de plataformas petrolíferas, limpieza de tuberias de conducción y transporte, o por hundimiento de barcos de menor calado (valga de ejemplo el reciente incidente acaecido en la bahía de Algeciras) o simplemente en casos de maquinarias que se deshacen de sus residuos contaminantes (fábricas, pequeñas embarcaciones…). Hechos ellos que raramente llegan a conocimiento de la opinión pública.

Principales accidentes petroleros:

FECHA – BUQUE – ZONA – VOL.DERRAM.
1979 Atlantic Express Trinidad Tobago 279 mil toneladas
1991 ABT Summer 700’ de Angola 260 mil toneladas
1983 Castillo de Bellver Sudáfrica 252 mil toneladas
1978 Amoco Cádiz Francia 223 mil toneladas
1991 Haven Génova 144 mil toneladas
1988 Odyssey 700’ de Canadá 132 mil toneladas
1967 Torrey Canyon Gran Bretaña 120 mil toneladas
1972 Sea Star Golfo de Omán 120 mil toneladas
1980 Irenes Serenade Grecia 102 mil toneladas
1977 Hawaian Patriot 300’ de Honolulu 101 mil toneladas
1979 Independenta Turquía 95 mil toneladas
1976 Urquiola España 91 mil toneladas
1975 Jacob Maersk Portugal 88 mil toneladas
1993 Braer Gran Bretaña 85 mil toneladas
1989 Khark 5 120’ de Marruecos 80 mil toneladas
1992 Aegean Sea España 78 mil toneladas
1996 Sea Empress Gran Bretaña 72 mil toneladas
1992 Katina P. Mozambique 72 mil toneladas
1985 Nova Irán 71 mil toneladas
1983 Assimi 55’ de Omán 53 mil toneladas
1974 Metula Chile 50 mil toneladas
1971 Wafra Sudáfrica 40 mil toneladas
1989 Exxon Valdez Alaska 38 mil toneladas
Fuente: Intertanko-otros.

La Tierra, y el mar en particular, poseen una capacidad vital de regeneración con seres vivos capaces de asimilar productos tóxicos o con procesos físicoquímicos a largo plazo (sistema de referencia edad geológica, y la Tierra tiene aproximadamente 4500 millones de años). No obstante esa capacidad no significa que la Tierra o el mar sean sumideros universales dónde el ser humano pueda volcar todos sus desechos y sentarse a espera la desaparición de los mismos. Las sustancias tóxicas introducidas por el ser humano en la naturaleza son dinámicas, en cuanto a que se expanden por todo el planeta transportadas por ríos, vientos, lluvias, corrientes marinas, etc, y se introducen en la cadena trófica (nutrientes-vegetales-hervíboros-carnívoros), en las plantas y animales que más tarde utilizará y consumira el ser humano de nuevo.

Tratamientos frente a la contaminación petrolífera
El petróleo es una amalgama de componentes, fundamentalmente hidrocarburos (compuestos formados por carbono e hidrógeno) con pequeñas catidades de azufre, oxígeno, nitrógeno y metales pesados como hierro, cromo, níquel y vanadio entre otros.

Frente al tratamiento de la contaminación petrolífera, los procesos químicos (dispersantes, sorbentes, de-emulsificadores, precipitantes y/o gelatinizantes) se presentan agresivos para con el medio ambiente y con importantes efectos secundarios. Los procesos físicos (barreras flotantes, bombas recolectoras) están influenciados por las condiciones climáticas y geográficas, así como por la capacidad humana, esto es, la disponibilidad de maquinaria, de material y de recursos humanos apropiados. Los procesos biológicos se encuentran en estado de investigación y desarrollo. Pero son estos los de mayor proyección dado que son los que mejor cumplen la premisa de la sostenibilidad en las tareas humanas, al incorporar procesos y ciclos ya presentes en la naturaleza, con metabolitos y sustancias que la vida ha inventado y desarrollado a nuestro servicio, si somos lo suficientemente inteligentes para emplearlas correctamente.

La comunidad científica internacional está presentando estudios y proyectos en esa línea de investigación. Ejemplos de ello son estudios sobre cianobacterias (algas verde-azuladas) con un alto potencial en la limpieza de aguas contaminadas por nitratos y fosfatos (Ref. 1). Estudios sobre la respuesta de bacterias (especies de Mycobacterium, Rhodococcus, Gordona o Sphingomonas, por ejemplo) y hongos (de los géneros Trichoderma, Penicillium, Aspergillus y Paecilomyces) a benzopireno en medios de cultivo (Ref. 2), microorganismos que utilizan hidrocarburos para su multiplicación y crecimiento, y que curiosamente son extraídos de suelos contaminados desde hace años por la industria petrolera, lo que es índice de su gran capacidad de adaptación. Estudios en la búsqueda de posibles microorganismos capaces de degradar asfaltenos (Ref. 3) o sobre la extraccion de minerales (Ref. 4), o en el tratamiento de aguas residuales.

Así mismo ya hay disponibles en el mercado productos biológicos (suspensiones de microorganismos principalmente) para el tratamiento de pequeñas superficies contaminadas por petróleo, sus derivados y aceites, o para la limpieza de tanques y conductos. Si bien en el tratamiento de los macroderrames no existe aún la biotecnología adecuada ante la magnitud del problema y su presencia en el medio marino.

Responsabilidad institucional
A raíz del impacto causado por los grandes desastres de buques petroleros se hace patente la ineficacia de las diversas autoridades responsables en materia de prevención. A pesar de los diversos cambios en las legislaciones, los diversos convenios internacionales, y las recomendadas líneas de actuación, persisten graves defectos de forma. Buques que navegan bajo banderas de conveniencia, tripulaciones mal preparadas, sin la formación adecuada y con sueldos ínfimos frente al gran negocio para el que trabajan, en muchos de los casos con diferentes nacionalidades y sin una lengua común. Graves defectos surgidos en gran medida por un modelo económico que antepone el dinero frente a factores de seguridad, laborales o ecológicos. Una vez producido el desastre se presentan nuevas negligencias a la hora de la toma de decisiones, pues estas son tomadas con bases poco profesionales.

Se hace evidente la necesidad del fomento de las líneas de investigación en este campo. Aquí la investigación científica básica se presenta como la única herramienta eficaz capaz de generar conocimiento, un conocimiento que es prerequisito imprescindible a la hora de futuras aplicaciones industriales.

La biotecnología, junto a las telecomunicaciones, se está convirtiendo en la revolución industrial del siglo XXI. Y en este aspecto, el estado español, está perdiendo el tren del progreso al menospreciar a sus científicos y forzarlos al exilio laboral. Científicos que producen patentes en el extranjero, y patentes que tarde o temprano el Estado se verá obligado a comprar, rozando una enésima vez más la pirueta imposible de la negligencia política.

Von Kayoyen. Heidelberg. 26 Enero 2003.

Referencias:

1. – http://www.ancla.com.ar/Download/Contaminacion.pdf
2. – http://www.colpos.mx/agrocien/Bimestral/2002/sep-oct/art-1.pdf
3. – http://www.medigraphic.com/pdfs/lamicro/mi-2001/mi013g.pdf
4. – http://www.mobot.org/jwcross/phytoremediation/Biotecnologia.htm

Otras:

http://www.eafit.edu.co/revista/114/gil.pdf
http://www.imp.mx/publicaciones/prospectiva/prosp_c06.pdf