El Ejército de los Estados Unidos de Norteamérica planifica la ampliación de la base militar Patrick-Henry-Village situada en la localidad de Heidelberg, estado federado de Baden-Württemberg, Alemania. Ante un mutismo generalizado incomprensible por parte de los medios de comunicación nacionales, informamos un poco.
Diversos medios locales de Heildelberg, y sobre todo la Iglesia Evangélica de Baden informa sobre los proyectados planes de actuación.
· Desaparición de hasta 700 hectáreas de terreno cultivable en la cuenca del Rin.
· Pérdida de una de las fundamentales reservas de agua potable de la región.
· Pérdida de uno de los pulmones de la ciudad de Heidelberg. Un informe municipal de mediados de los 90 desaconseja la expansión urbana en esa zona.
· Fin de unas 50 explotaciones agrarias familiares.
· Separación y alejamiento de diversas localidades próximas entre sí (cabe recordar que la libre circulación dentro del territorio estadounidense está vetada), así como el distanciamiento entre las comunidades alemana y estadounidense.
Quizás sea este último punto el de mayor sarcasmo, pues la integración de los soldados estadounidenses en la vida cultural y social alemana es mínima, si exceptuamos algún que otro bar y discoteca selecta durante el fin de semana y los macro centros comerciales alemanes próximos a la base. Si bien lo que pueda resultar más espeluznante es el testimonio de las familias de agricultores afectadas, cuya fuente de vida se ve muy amenazada.
Rumores corren sobre la creación de campos minados sumados a los muros de alambrada ya existentes. Nada sorprendente viendo las macro (y un tanto paranoicas) medidas de seguridad tomadas por el ejército estadounidense a raíz del tristemente famoso 11-S. Ante todo ello el gobierno alemán se encuentra atado de manos, pues si aún este se negara a la ampliación, los tratados de capitulación de la Alemania nazi permiten al ejército estadounidense la expropiación del terreno del que este quiera disponer.
Dejen de golpearse contra la pared y entiendan que de este lado occidental no ha caído ningún muro, mucho menos el de Berlín. Después de 60 años, ningún político en activo queda en esta Alemania que tuviera que ver sea directa o indirectamente con aquel régimen. Con una sociedad cuando menos regenerada de aquel cáncer, el Ejercito de los Estados Unidos planea ampliar su cuartel general en Europa. Cuartel general al que hay que sumar las instalaciones militares de Mannheim, Frankfurt, Darmstadt, Stuttgart, Rammstein (la mayor base militar estadounidense en Europa) etc. No se podrá decir que los Estados Unidos busquen recursos naturales en esta vieja Europa o que deseen captar nuevos científicos brillantes de ciudades universitarias sin bombardear, ¿serán entonces intereses geoestratégicos de esos que a los ciudadanos de a pie no nos incumben?. Sea lo que sea, agárrense, que vamos a tener libertad y muy duradera.
Vonkayoyen. Heildelberg. 26 Noviembre 2002