La marcha blanca. El Salvador esta hablando

Hoy día 23 de Octubre, y por segunda vez en lo que va de mes, el pueblo salvadoreño sale a la calle a expresar su oposición ante la reorganización que el presidente Francisco Flores pretende hacer del ISSS (Instituto Salvadoreño del Seguro Social).

Estas movilizaciones son el resultado de una larga huelga a la cual parece no versele el fin; una huelga a la que se han ido sumando médicos y enfermeras de centros públicos de todo el pais, que ha hecho que ya hayan sido entregados 10 hospitales, y a la que mañana se sumarán los centros privados como muestra de apoyo.

El presidente Flores está vendiendo poco a poco el país y lo está dejando en manos de capitales extranjeros y de unas pocas familias que mantienen el poder político y económico. Pero las reformas que el presidente propone, y que apuntan a una privatización del Seguro Social, esta vez han sido la gota que colma el vaso de una ciudadanía que ve cómo cada vez tiene menos posibilidades de acceder a la educación, la salud, o simplemente el alimento.

La constitución de la república es muy clara al respecto en su artículo 1 complementado con los artículos 65 y 66: Es deber del Estado garantizar el goce de la salud, mediante un sistema de Seguridad Social financiado por patronos, trabajadores y el estado mismo, así como proporcionar un servicio de salud gratuito a quienes no se incorporen en él. El gobierno de ARENA con el establecimiento de cuotas por servicios pretende dar el primer paso hacia la privatización como ya hizo con las grandes empresas nacionales de comunicaciones y energía eléctrica, así como con el sistema nacional de pensiones.

Poner el Seguro Social en manos de capital privado significa imposibilitar el acceso a la salud a una población con uno de los mayores índices de desempleo, una población en su mayoría campesina o que subsiste con salarios muy por debajo del mínimo establecido, y que debería comenzar a pagar por ser atendida, unas cuotas que están absolutamente fuera de su alcance.

La marcha blanca de hoy, a la que se espera acuda medio millón de personas entre sindicatos de médicos, estudiantes, transportistas, cafetaleros, campesinos y maestros, es una voz que se alza para pedir que el presidente no continúe vendiendo al pueblo salvadoreño en favor de un modelo neoliberal insostenible.

Señor Presidente, El Salvador le está hablando, ¿va usted a escucharlo?.

Febe. San Salvador. 23 Octubre 2002.