The man who wasn´t there. EE.UU. 2001.
Dirección: Joel Coen
Fotografía B/N: Roger Deakins
Interpretes: Billy Bob Thornton, Frances McDormand, Michael Badalucco, Adam Alexi-Malle, James Gandolfini, Katherine Borowitz, Jon Polito y Scarlett Johansson.
Ed Crane es un hombre tranquilo, callado.
Trabaja en una peluqueria junto a su propietario y amigo.
Un dia, entra en su lugar de trabajo un hombre que le propone un negocio, del cual, Crane decide pagar 10.000 dolares para llevarlo a cabo.
A raiz de aceptar este negocio los acontecimientos se van complicando.
Los hermanos Coen, Joel y Ethan, son sinónimo de calidad y en este caso nos ofrece la visión de un hombre algo triste, serio y que deja pasar los acontecimientos como si él no participase en ellos, un hombre que observa, que vive en los recuerdos (nada extraordinarios) y que vive en parte en su mundo interior y propio.
Este personaje, que en apariencia es un hombre vacio y anodino, los Coen le inyectan su magia particular y consiguen que todo gire a su alrededor y termine siendo un personaje riquisimo.
Los Coen son verdaderos genios creando personajes, como John Turturro en Barton Fink que se fusiona actor y personaje de una manera asombrosa, – el nota – de El gran Lebowski y sus compañeros de bolera, incluido Turturro, esta vez en el papel de Jesus Quintana.
El actor que interpreta a Ed Crane, Billy Bob Thorton, está sencillamente extraordinario.
Le da un peso y una consistencia perfecta al personaje, su rostro en blanco y negro fumando un cigarro, las arrugas de su cara, su inexpresividad, su rostro observando, el humo…todo de una imagineria de cine negro de los años 40 pero con el toque de Joel Coen en la dirección que la saca del género ubicandola en un film de este siglo pero que añora una historia y una manera de hacer cine que se perdió.
En algún aspecto recuerda a la estética del comic, lo cual refuerza la idea de mezclar todos los aspectos de una epoca del siglo veinte.
Seria injusto no hablar de la fotografia de Roger Deakins, que es extraordinaria y ayuda a una ambientación perfecta y efectiva.
Se podria hablar horas de esta pelicula que es una obra de arte absoluta, con un proceso creativo importante y un guion sólido, sorprendente y una pelicula única.
Para ser del todo sincero, cuando la vi, salí del cine con la sensación de que habia visto algo lento y aparentemente vacio.
Luego, mas tarde, masticando ideas y pensamientos a la hora de dormir la revise en mi cabeza y redescubrí el personaje de Crane y su manera de ver la vida y revaloré la pelicula y pude darme cuenta de lo bien que estaba diseñado el personaje y el guión entero.
El personaje que interpreta Thorton no es inteligente, ni culto, ni es rico, es un ciudadano normal, es el peluquero de un pequeño lugar de los Estados Unidos que tiene una manera propia de ver la vida y que al parecer él no contaba con eso que le llaman vivir.
De alguna manera la vida pasa tan fugaz que parece que no vives, son tan efimeras las emociones, los sentimientos y el recuerdo es tan nebuloso, que realmente da la sensación de que nosotros no estuvimos allí.
Vibrissae. Sevilla. 27 Abril 2002